Un mago de cuidado.

Los magos de todo el mundo tenían por costumbre reunirse una vez al mes para intercambiar nuevas fórmulas e inventos.  Pero los pobres acababan siempre tan cansados de viajar que, durante una de las asambleas, decidieron fundar una nueva ciudad.  Se llamaría Muchosmagos, y en ella vivirían todos felices y contentos.  Dicho y hecho.  Todo iba bien hasta que nació un maguito muy, pero que muy especial...








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